El regreso del Baume et Mercier Riviera

Con su estilo decididamente de los años 1970, este clásico de rasgos opulentos regresa renovado. Ostenta los valores de la casa, encabezados por su mejor mecánica. #WatchesandWonders2021

Baume et Mercier Riviera

El Baume et Mercier Rivera nació en 1973, justo en un momento de innovación estilística, arrojo y desenfado, marcado por la renovación de las tendencias y estilos de aquella era e impactado por la vida y color sociales de destinos como la Costa Azul francesa.

El Riviera se trataba de un reloj potente y distintivo, toda vez que, en esos tiempos, salvo históricas excepciones de las grandes casas —de la mano de genios del estilo como Gérald Genta y Jorg Hysek—, pocos se atrevían a romper el molde habitual de las cajas de 34-38 mm y los metales preciosos. El deportivo Riviera —un digno abanderado de la rica historia relojera de la casa nacida en 1830— se instauró entre los cognoscneti del buen diseño gracias a su contundente claustro de acero con su bisel de 12 facetas con cuatro tornillos funcionales que lo aseguraban.

Este 2021, Baume et Mercier recupera el Riviera y lo presenta en variadas referencias que bien definen el rol que jugará en el futuro: un reloj deportivo, versátil y variado en sus presentaciones. Los primeros Riviera se presentan en dos tamaños, 42 y 36 mm, y son impulsados por mecánicas automáticas o de cuarzo. El bisel dodecagonal ofrece un terminado cepillado con cantos pulidos que le concede una frialdad moderna, en tanto los cuatro tornillos de dado hexagonal reposan en las “esquinas” de la cuadratura del conjunto. Como punto culminante de su oferta de valor y versatilidad, los Riviera incorporan un sistema de cambio rápido de las correas y brazaletes. Estos últimos ofrecen un eslabón integrador medio para unirse a la caja y muestran un terminado satinado semejante como el de la carrura y bisel. Luce correcto y moderno.

En la cima de la colección encontramos los dos Riviera Baumatic, en caja de acero de 42 mm y que portan el calibre exclusivo de Baume et Mercier que se distingue por su elevada autonomía de 5 días y su gran resistencia al magnetismo. El primero lleva una carátula de zafiro ahumada en tono azul y se acompaña de un brazalete, en tanto que la otra lleva una faz cristalina en gris y porta una correa. Los cuadrantes transparentes ofrecen una vista parcial del anverso del Baumatic mas no me parece que se sientan recargadas.

Enseguida, encontramos otra tres Riviera en acero y también en 42 mm, pero con carátulas convencionales en tonos azul, negro o plateado, y un calibre automático Sellita latiendo por dentro. Todos los Riviera de 42 mm tienen una resistencia al agua hasta 100 metros.

Baume et Mercier Riviera

Finalmente, están las interesantes opciones en 36 mm, una de las cuales es automática. Esta se ofrece con un dial plateado y brazalete, en tanto que las otras ofrecen diversas opciones de caras en azul o plata (con brazalete) y negro (con correa). Estos relojes tienen una hermeticidad de 50 metros.

Si por las formas “setenteras”, robustez de caja y prominente bisel geométrico le parece una buena idea comparar este nuevo Riviera contra otros iconos de los 70s, especialmente las creaciones del inolvidable Gérald Genta que no nombraré, adelante; no lo detendré. Pero mejor no lo haga. Sería un esfuerzo fútil, pues ello podría hacerle perder de vista de lo que se trata el Riviera: un reloj honesto, de alto valor y bastante agraciado. A ello se suma que el Riviera fue un hit hace más de 45 años por esos mismos atributos y por eso bien merecía una nueva vida en este mundo demandante de valor y estilo. Creo que el Riviera cumple con creces y refuerza mi opinión que B&M tiene algunos muy bien secretos en su alineación, especialmente el Clifton Club, una colección deportiva fresca y recatada que abrió el camino para este nuevo Riviera.

El Rivera es más arrojado. B&M tomó su clásico y lo puso al día con sus mejores atributos modernos, específicamente, el calibre Baumatic. En su modalidad de 42 mm con la carátula ahumada y el movimiento automático de manufactura, el reloj es brillante. En cada una de las propuestas que sostienen el concepto y la colección entera —con sus mecánico y cuarzos por igual—, encontramos ese estilo y buena hechura aparente. IMHO, el Riviera no tiene pierde.

Baume et Mercier Riviera

Te puede interesar:

Una nueva era para la iniciativa Baume, de Baume & Mercier

La marca Baume, de Baume & Mercier, continuará ofreciendo sus experiencias de personalización de relojes ahora, integrada dentro de la Maison.