Existen autos deportivos que son tan reconocidos que solo se necesita pronunciar su nombre para tener una imagen clara sobre lo que se está hablando. Así es el Mustang de Ford. A través de los años, este legendario deportivo ha marcado huella en la vida de miles de pilotos apasionados por el automovilismo, quienes desde la primera generación de Mustang se dejaron conquistar por la adrenalina detrás de su volante.
Incluso aquellos quienes no son asiduos a los autos deportivos podrían reconocer un Mustang a simple vista. ¡Quién podría olvidar a Tilly Masterson manejando aquél Mustang convertible de 1964-1/2, en Goldfinger!
No es una sorpresa que exista toda una cultura alrededor de este auto americano, y para honrar su historia repleta de pasión, adrenalina y fuerza, Ford de México organizó la Estampida Mustang: una caravana en la que 960 conductores de Mustangs, de todas las generaciones, se reunieron con el objetivo de romper un nuevo Récord Guinness.
Dentro de las instalaciones del Centro Dinámico Pegaso, en Toluca, México, los automóviles avanzaron durante 3.2 kilómetros para brindar una exhibición única, que recopiló seis generaciones de este auto emblemático deportivo. Desde lo más antiguos, pasando por ediciones de aniversario, hasta los últimos modelos, los autos desfilaron con los colores y líneas que guardan el estilo histórico y característico de la marca, en una estampida que deslumbró al público mexicano con sus inigualables caballitos.
Honor a quien honor merece: Estampida Mustang
Si algo tenemos que reconocer es la labor que Ford inyectó en la organización para convocar una cantidad de pilotos de Mustang suficientes, para lograr una estampida de tal magnitud.
La logística fue verdaderamente eficiente. De hecho, iniciaron la planeación del evento con cerca de tres meses de anticipación para poder reunir a los cientos de conductores, provenientes de varios estados del país, quienes participaron en la Estampida Mustang. Y a lo largo de esos tres meses, los conductores nunca perdieron la emoción.
La condición a la que Ford de México se enfrentó para poder ingresar al libro de Récord Guinness estaba en que los automóviles tenían que encontrarse en perfectas condiciones. De hecho, en un inicio, la cantidad de Mustangs reunidos en el Centro Pegaso rondaba los mil uno, pero no fue hasta que los jueces de Récord Guinness dieron el visto bueno, que el récord se rompió con la cantidad oficial de 960 vehículos; por supuesto, los participantes recibieron con grato orgullo una merecida insignia conmemorativa.
Pero no sólo eso. Ford, además, aprovechó el momento y la energía de los fanáticos del ‘auto del caballito’, para mostrar el nuevo Mustang 2018. Un automóvil completamente recargado de poder, con nada más y nada menos que 460 caballos de fuerza y un diseño bastante aerodinámico. Ya ahondaremos en el tema en otra ocasión.
Mientras tanto, sea cual sea la cantidad de autos que se reunieron, si hay algo que quedó claro durante la Estampida Mustang, no solo está en la capacidad de convocatoria que tiene Ford, sino en el reflejo del verdadero culto que existe ante un automóvil deportivo que desde 1964 es toda una leyenda.
