Continuando la consolidación de su relojería de autor, absolutamente impregnada de innovación relojera, Jacob & Co. presenta una nueva iteración de su reloj “deportivo” de gran complicación: el Twin Turbo de doble tourbillon tri-axial y repetidor de minutos.
Hoy, la firma fundada por Jacob Arabo honra su asociación con Bugatti, la legendaria casa de Molsheim, creadora de los hiperautos más icónicos de nuestra era, y la materializa en su nuevo “hiperreloj”: el Twin Turbo Furious Bugatti 300+.
Los entusiastas al automovilismo de tecnología extrema, y particularmente a los superados exóticos, salivan cada vez que Bugatti está en las noticias. Su más reciente invención, el Chiron, con sus alrededor de 1,500 caballos de fuerza y desempeño brutal, ocupó de inmediato un lugar privilegiado en el Valhalla del automovilismo moderno como digno sucesor del Veyron. Pero el 2 de agosto de 2019, su trono se elevó a un nivel aún más alto.
Ese día, un Bugatti Chiron conducido por Andy Wallace, piloto oficial de Bugatti y ganador de las 24 Horas de Le Mans, rompió la barrera de las 300 millas por hora (482 km/h), alcanzando 304.77 (490 km/h) hasta el momento en que Wallace tuvo que frenar porque se le iba a terminar la pista. Esta hazaña inspiró el reloj que hoy nos ocupa.
Una celebración al estilo Jacob & Co
Creado para celebrar el hipercoche de producción en serie más rápido del mundo, el Jacob & Co. Twin Turbo Furious Bugatti 300+ hace eco de los materiales y colores del Chiron Super Sport 300+, al tiempo que introduce una apariencia refrescada.
El calibre JCFM05 de gran complicación está compuesto por 832 partes individuales, increíble si se considera que un número significativo de esas partes se relacionan mecánicamente y son visibles.
El movimiento de titanio negro está equipado por un regulador por torbellinos duales multirrotacionales de alta velocidad —las jaulas de cada tourbillon giran en 24 (interna), 8 (intermedia) y 72 segundos (externa)—. A ello se suma un repetidor de minutos decimales y un cronógrafo monopulsador. No sobra decirlo una vez más: el Twin Turbo es todo un prodigio micromecánico.
Los repetidores de minutos son las complicaciones más preciadas por los coleccionistas y están entre las más difíciles de concebir. El del Twin Turbo Furious Bugatti 300+ es decimal. Es decir, suena en intervalos de diez minutos después de las horas y antes de los minutos.
Adicionalmente, Jacob & Co. fue aún más lejos al añadir una función de cronógrafo a monopulsador muy específica: el contador está equipado con un indicador de “tiempo de referencia”. Inspirado en los tableros de los pits de de las carreras automovilísticas, el despliegue de tiempo de referencia se encuentra en el centro del dial, indicando la diferencia en segundos en comparación con un tiempo de referencia. La reserva de energía está etiquetada como “300+” y se muestra en el lado del dial a las 6 en punto. Al reloj se le da cuerda a través de la manivela colocada en la corona a las tres en punto.
Así como complicado es el calibre de 832 componentes, también lo es la caja que lo alberga. Está construida en carbono forjado, con un núcleo de titanio para asegurar la resistencia al agua, y está conformada por la caja por 88 partes. Este asombroso instrumento estará disponible, apropiadamente, en una limitadísima emisión de tres ejemplares. El Twin Turbo Furious Bugatti 300+ es genuinamente un reloj divino para el “Rey de los Hiperautos”.
