Longines renueva su colección 1832

Longines redondea la evocadora serie con nuevas mecánicas y carátulas, donde el color negro se presenta por vez primera.

Longines
Longines 1832 Moonphase.

A pesar de las circunstancias tan extrañas que nos abruman en este 2020 es satisfactorio ver cómo las casas relojeras nos mantienen a la expectativa con nuevos lanzamientos. Hoy toca el turno a Longines, la maison de Saint-Imier que ha lanzado oficialmente las novedades dentro de su colección Longines 1832.

Como ya le habíamos adelantado en la edición impresa de Revolution de esta primavera, Longines ha preparado una muy completa ofensiva de producto para su clientela latinoamericana. Para el caso de Longines 1832, la novedad se centra en el debut de carátulas negras para la colección. En efecto: Longines jamás había usado el color en esta serie.

Esta colección rinde tributo a los orígenes de la casa y lo hace por medio de forma y proporciones elegantes y clásicas. Así como la serie The Master Collection representa los valores de la relojería suiza, 1832 siguió ese camino en lo general, pero se enfoca más en los albores de la casa y las raíces de su historia e inspiraciones. Ello explica que los relojes  hayan mantenido una idea estilística más convencional, dominada por cuadrantes en color blanco y detalles con estilo vintage.

Así pues, esta gama ahora presume de estas nuevas carátulas en color negro mate, disponibles en las referencias de tres manecillas con fechador —en 30 y 40 milímetros de diámetro—. Luego, el nuevo y formal aspecto se expande hacia los relojes con las mejores complicaciones de la serie:

La primera es el Longines 1832 Moonphase, el modelo más representativo de la colección y que usa el estupendo calibre L899 (3.5 Hz de frecuencia y 64 horas de reserva de marcha), creado en exclusiva para Longines y que integra fechador por manecilla y fase lunar en el pequeño registro a las 6 en punto.

La otra notable referencia es el Longines 1832 Annual Calendar, con esta fascinante y subvalorada complicación que usa el movimiento automático L897, que también bate a 3.5 hercios y tiene la misma autonomía de 64 horas.

Par redondear la actualización de la colección, a Longines 1832 se suma una variante femenina creada en carátula de color beige de madreperla y realzada con índices horarios de diamantes. El reloj de caja en acero de 30 milímetros de diámetro también porta un movimiento mecánico automático, el L592.5 de 40 horas de reserva de marcha.

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