Maillon: el nuevo tesoro de Cartier

La maison francesa debuta Maillon, nueva colección de relojes que pone en valor una artesanía joyera tan innovadora como resplandeciente.

Cartier

Maillon de Cartier representa la nueva propuesta de la gran firma francesa en materia de relojes-joya, históricamente rica en inspiraciones y formas. El nuevo reloj Maillon da un nuevo paso al frente por medio de un lenguaje afín a las matemáticas y la geometría, y establece su propio concepto de feminidad con una creación que es tan artística como técnica.

El punto de partida de Maillon es el brazalete, que propone un estilo que no habíamos visto. De gruesos eslabones interconectados, presentan una forma bastante dinámica anclada en el efecto de torsión de la alineación sesgada de cada uno de los gruesos “lingotes” de oro sólido. Su curvatura —que los hace ver cuales bumeranes— aviva los reflejos de sus superficies pulidas para darle un toque orgánico a la definición técnica del diseño.

El complemente horológico —la caja— se integra a la propuesta estilística del brazalete. La caja de Maillon saca partido de ese efecto visual y propone una forma hexagonal asimétrica, que de manera casi orgánica se funde con el brazalete. Notable es el atrevimiento de Cartier a la hora de diseñar una caja de trazos rectos y ángulos marcados, enfatizados por un grueso bisel y las estupendas asas asimétricas que se vuelven parte del brazalete. La corona, esta un hexágono regular, añade el toque de distinción: su cabujón precioso hecho de zafiro o diamante, dependiendo de la referencia de la que se trate.

El brazalete como seña de identidad Maillon

Cartier

No es inexacto decir que Maillon de Cartier es más brazalete que reloj. Marie-Laure Cérède, directora creativa de la relojería de Cartier confirma la idea: “quisimos reconstruir el brazalete y trascender su diseño por medio de una propuesta volumétrica”. Es imposible no perderse en el resultado final que, de alguna forma, juega con una idea orgánica de integración, pero lo logra a través de un solución geométrica. Maillon es un nuevo episodio de reinvención de la horología femenina de Cartier; puede verse como una nueva manera de proponer las emociones que causa un reloj-joya a través de un diseño técnico, lleno de movimiento y estructura.

Como buen reloj-joya que es, el embellecimiento de Maillon, a través del engastado, cobra nueva vida en este original lienzo tridimensional. Así, las piedras preciosas realzan el diseño de la pieza, dependiendo de la referencia.

Los relojes con incrustaciones de brillantes en carátula y bisel reflejan la secuencia de los eslabones. La elección de las piedras en la versión de laca azul y tsavorita resalta la cinética figurativa del marcatiempos.

En cada una las seis referencias que Cartier nos reveló, el juego de volúmenes, contrastes y sombras se reinventa en cata iteración, desde la de oro amarillo de 18 K, hasta la de oro blanco 18K de engastado absoluto en caja y brazalete con 486 piedras.

Como la proverbial joya de la colección, una edición especial limitada de 80 ejemplares presume de una carátula acabada en laca negra, con un engastado total de 580 diamante que suman 9.4 quilates.

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