La magia de los relojes esqueleto

Texto original: Ken Kessler.

Foto de portada: El reloj original Breguet Marie Antoinette, encargado en 1783 y diseñado para contener todas las funciones de reloj conocidas hasta ese momento. La reina francesa nunca vivió para ver el reloj, ya que se completó 34 años después de su ejecución. Ahora, la pieza reside en el Instituto LA Mayer de Arte Islámico, de Jerusalén; una obra maestra con esqueleto en oro, valuada en más de $ 30 millones de dólares.

A lo largo de las últimas dos décadas, los fondos traseros de exhibición se han vuelto de rigor, ya que permiten al portador examinar las entrañas de un reloj sin tener que recurrir a abrir la caja. Lo más cercano que tenemos a un “esqueleto hacia atrás” en otros campos son los bolígrafos llamados “demostradores”, hechos de material transparente, producidos para mostrar cómo funciona un bolígrafo y ofrecidos por marcas como Visconti, Omas, Ferrari o Bugatti.

Pero eso es sólo la mitad de lo que logra un esqueleto. Al retirar el dial por completo se muestran ambos lados del movimiento del reloj. Bulova lo utilizó con buenos resultados, cuando el Spaceview permitió a los curiosos examinar su nuevo movimiento electrónico: con su resistencia, diapasón y bobinas para que todos pudieran verlo. Pero había más en los movimientos “esqueletizados” (o “trabajados abiertamente) que simplemente revelar el movimiento.

Los relojes completamente abiertos no son nada nuevo, su origen se remonta a los relojes de bolsillo más antiguos. El esqueleto se convirtió en un medio para lograr reducir las placas y los puentes a su mínimo, al tiempo que ofrece soporte para las partes móviles. El propósito es totalmente estético, a menos que uno quiera argumentar que la escisión de unos pocos gramos de metal de alguna manera mejora la ergonomía del reloj gracias a la ligereza.

Los esqueletos existen puramente para deleitarnos visualmente y para dificultar la vida de los relojeros.

En la mayoría de los relojes esqueletos, el exceso de metal se elimina de placas y puentes, por lo que el relojero debe considerar cómo afecta esto a la integridad estructural de la pieza. Esto no es tan paranoico como puede parecer: en el mundo microscópico del movimiento de un reloj, incluso las corrientes de aire alrededor de las partes móviles se miden por su efecto en la velocidad, por lo que la resistencia a la tracción es un desafío.

Mientras que el más básico de los esqueletos es un reloj sin dial y con cristal en ambos lados, las placas y los puentes permanecen llenos. El uso del término “esqueleto” ha llegado a aplicar sólo a aquellos relojes donde se eliminó el exceso de metal.

Pero eso tampoco es suficiente para alcanzar el nivel más alto del arte de los relojes esqueletos, ya que no puedo recordar un verdadero esqueleto en el que los puntales restantes y delgados no hayan sido decorados o ni siquiera decorados.

Después de eliminar todo el metal sobrante, el relojero crea una celosía que recuerda a los encajes finos, hechos sólo de metales preciosos.

Sin embargo, incluso con tan poco que queda para decorar, los acabados forman un ángulo, en el que graban y pulen cada milímetro de superficie, a menudo pavimentando al reloj con pequeñas gemas. Esto, también, se aplica a los relojes que se describen mejor como “inherentemente esqueletizados” porque no emplean diales, placas o puentes convencionales en ninguna etapa.

Entre ellos se encuentran relojes de Roger Dubuis, Richard Mille, Greubel Forsey, Manufacture Royale, Cvstos, entre otros.

La mano de obra intensiva se suma al costo de un reloj con esqueleto, aunque los fabricantes tienen una pequeña ganancia financiera que rara vez se discute: esqueletizar un movimiento de oro genera materiales que se pueden recuperar y reciclar. Con los precios del oro siendo lo que son, eso es una consideración importante.

Seis sorprendentes relojes esqueleto

Blancpain Villeret Squelette 8 Jours

Blancpain tiene un profundo respeto por las tradiciones centenarias, por lo que el esqueleto es una ruta natural para la casa relojera. Pero mientras uno podría esperar un esqueleto acorde con lo convencional, Blancpain agregó algunos adornos estéticos que evitan la simetría o la adherencia al orden para lograr mayor fluidez.

El Blancpain Squelette utiliza el calibre de manufactura de cuerda manual 1333SQ. Está equipado con una balanza de titanio, un resorte de balanza Breguet y tres barriles para lograr una reserva de energía de ocho días. Los artesanos esqueletizaron todo el movimiento y decoraron cada superficie, al llenar la caja de oro blanco de 38 mm y permitiendo que pasara suficiente luz para crear el deslumbrante efecto que hace que cualquier esqueleto sea tan atractivo.

Para Blancpain, la decoración del movimiento fue primordial, y la compañía citó, también, la importancia del biselado sublime. El movimiento de Blancpain se ve tan ligero y delicado como una tela de araña, el diseño de la naturaleza que emulan todos los esqueletos, a la vez que ofrece la integridad estructural que exige el movimiento. En este reloj, los puentes y la placa principal cuentan con un motivo de desplazamiento que agrega curvas femeninas de forma floral.

Breguet ha presentado una serie de esqueletos desde que la marca hizo su regreso en los 90’s. De hecho, su modelo Heritage está esquematizado intrínsecamente en virtud de que el dial de horas y minutos es un pequeño sub-dial que flota sobre la placa principal.

Aunque la palabra “convencional” no tiene un uso real en esta compañía, el reloj de pulsera Classique Tourbillon de platino abierto es convencional porque lleva un reloj con un dial normal y lo esqueletiza por completo.

El resultado es un reloj tan complejo como puede ser, su tourbillon de segundos de funcionamiento se encuentra en la posición de las 6 en punto, el dial de horas y minutos situado a las 12 en punto. El movimiento se enrolla manualmente, y cada parte expuesta, que comprende todas las áreas alrededor del mini-dial y el tourbillon, están completamente grabadas a mano.

Aunque este es un reloj aparentemente compacto de 35 mm, este modelo, que se ofrece en platino con una correa o un brazalete, es un reloj que llama la atención. Todos los esqueletos hacen eso, pero esto se mejora con los toques de la firma Breguet, desde las manecillas hasta el estilo de los anillos de los capítulos. Los puristas pueden oponerse al esqueleto, pero este modelo hace honor a su nombre con tal autoridad que la vistosidad seducirá incluso a alguien cuya idea de “desorden” es un reloj del Museo Movado.

Chanel se ha estado obsesionando con la alta relojería durante algún tiempo, habiendo dominado la cerámica con una facilidad insuperable. Su J12 es tan reconocible que adquirió un estado “clásico” casi en su lanzamiento inicial. Ahora es la plataforma para una amplia gama de modelos, que logra mezclar cerámica de alta calidad, esqueleto y tourbillones volantes.

Para el Chanel J12 Skeleton Flying Tourbillon, el material de la caja es de cerámica negra, mejorado con un bisel engastado de oro blanco, con su tourbillon volante en una jaula con diamantes. Reside en un dial de trabajo abierto, que proporciona esa característica tan codiciada de los esqueletos más audaces: muchas áreas transparentes.

El bisel, las manos y la jaula de tourbillon “estrella fugaz” se han colocado con diamantes de talla brillante, muy bien contrastados con la cerámica negra de la caja y la pulsera, mientras que la parte posterior de la caja está hecha de titanio. El movimiento de cuerda manual con reserva de energía de 40 horas fue desarrollado por los maestros de APRP Renaud et Papi.

Ahora hay un giro para los esqueletos tímidos: si los esqueletos tratan, en parte, de mostrar un movimiento, uno pensaría que agregar un velo sería contraproducente. Para Parmigiani Fleurier, la versión en esqueleto de su elegante Tonda 1950 se puede adquirir como un esqueleto normal, con cristal transparente o con un cristal esmerilado que indica el movimiento que se encuentra debajo, la absoluta timidez de este arreglo hace que el reloj sea notable.

Comienza con el movimiento automático PF 705 ultra delgado de la compañía, que se ofrece en dos versiones: para mujer y para hombre en cajas de 39 mm, pero la versión para mujer, en oro blanco o rosa, es un poco más gruesa (y más cara) porque lleva un bisel con incrustaciones de 84 diamantes. Debajo del vidrio esmerilado hay un movimiento completamente esqueleto, biselado y decorado con un micro-rotor descentrado hecho de platino sólido.

Las funciones están restringidas a horas y minutos, la reserva de energía es de 42 horas y cada reloj está grabado en su tapa de caja con un número individual y las palabras “Edición Especial”. Completa el diseño un brazalete de piel de lagarto marrón de Hermès con hebilla de ardillón.

Si bien se podría suponer que sólo un reloj lleno de complicaciones merece la esqueletización, los movimientos de sólo tiempo también son valiosos, ya que su simplicidad se presta para hacer un movimiento que apenas existe. Esta es la hermosa oferta de Ralph Lauren, que también es bastante grande a 45 mm, notable porque, en la muñeca, se ve la piel del propietario a través del dial.

Con terminados en negro, el Automotive Skeleton es el primer modelo de trabajo abierto de Ralph Lauren. En el interior se encuentra el movimiento Caliber RL1967 de cuerda manual mejorado con un logotipo de gran tamaño, en forma de las letras “RL” ubicadas a las 12 en punto en una plataforma circular de oro contra negro. Lo que identifica a esta familia de relojes, inspirada en los diseños del Bugatti Type 57SC Atlantic de Ralph Lauren en 1938, es un hermoso bisel en madera maciza Amboyna Burl, que recuerda al volante de la época.

Todas las superficies están acabadas en un negro que contrasta con la caja de acero inoxidable granallado. El movimiento en sí cuenta con componentes de acero y latón que proporcionan más contrastes visuales, como el gran equilibrio y el tren de engranajes. Las manecillas negras están llenas de Super-LumiNova en un tono beige para agregar a la sensación de la década de 1930.

Casi todos los relojes que llevan el nombre de Roger Dubuis muestran con orgullo el movimiento en su forma más magra. Al igual que con sus preocupaciones pasadas (tourbillons, diales de esmalte y otras prácticas), la esqueletización es parte del espíritu del fundador del mismo nombre: el de defender las habilidades y tradiciones de la relojería clásica de antaño.

La compañía ha creado un lenguaje de diseño en todas las gamas, al utilizar líneas arquitectónicas y una forma de estrella de cinco puntas formada por los puntales sobre el barril que enfoca el ojo. Cada superficie de la estructura restante en el Excalibur Spider Skeleton Double Flying Tourbillon de 45 mm ha sido activada por el motor, los distintos tonos de los materiales crean un efecto 3D dentro de la caja de titanio y negro DLC-titanio, resaltados por acentos de aluminio rojo entre los marcadores de hora.

Los colores y la tecnología pura del diseño también le brindan un aire deportivo. Si se tratara de un automóvil, estaríamos hablando de un Lamborghini Aventador, con su chasis iluminado hasta los límites y su integridad estructural mantenida.