El resurgimiento de algunos de los diseños relojeros más recordados de los últimos 50 años está muy bien representado por el nuevo Hamilton Intra-Matic Chronograph H. Este reloj de aires deportivos no solo reinterpreta un clásico estilo surgido a finales de los años sesenta, sino que lo redondea con un concepto relojero puro y esencial, gracias a su calibre de cuerda manual.
Para ser específicos, el atractivo cronógrafo se inspira directamente en los Cronógrafos A y B de la segunda mitad de la década de 1960. La identidad de aquellos Hamilton quedó bien definida por el empleo de una mecánica de cuerda manual, el Valjoux 7730, y luego por la llegada de la “versión Hamilton” del Calibre 11 en 1968. En materia de la estética, el Hamilton Chronograph A se alineó más con el estilo clásico de los cronógrafos clásicos de caja redonda, pero empleando subregistros contrastados tipo “panda”. Es justo esta fórmula la que energiza el alma del nuevo Intra-Matic Chronograph H.
El empleo de un calibre de cuerda manual —el H-51, una variante del venerable Valjoux 7753— es una noticia que no puede soslayarse. La decisión de integrar un movimiento que demanda atención por parte de su propietario para mantenerlo marchando es un genuino homenaje a quienes gustan de la relojería “personal”.
El haber “despojado” el cronógrafo de un tercer contador en la carátula (el 7753 usualmente lleva contadores de 12 horas a las 6, aquí eliminado; 30 minutos a las 3 y segundos constantes a las 9) y de la ventana fecha (normalmente plasmada a las 4:30) fue una decisión igual de loable que habla del interés que Hamilton ha puesto en los relojes de la serie Intra-Matic y en el orgullo que para la casa representan sus modelos históricos. El H-51 del Chronograph H ofrece una reserva de marcha de 60 horas, 50% mejor que la que correspondía al 7753.
Los detalles “vintage” abundan en este cronógrafo. La aplicación de SuperLuminova beige avejentado en los índices evocan el color del radio envejecido, y el cristal de zafiro tipo caja evoca aún más las características típicas de aquellos cronógrafos Hamilton de los años 60 y 70. La caja de acero de 40 mm tienes un grosor de 14.3 mm y se coordina con una correa de cuero negro o un brazalete de malla, un guiño más a aquellos instrumentos deportivos que atestiguaron el resurgimiento de la relojería deportiva.
