En 2023, Chronoswiss celebra su 40 aniversario. Y es la primera vez que la marca aprovecha esta oportunidad para reinventar uno de sus propios modelos. En esta singular ocasión la casa suiza le da nueva vida al Delphis, con la presentación del Delphis Oracle, que además de las horas saltantes, los minútos retrógrados, incluye una exclusiva esfera guilloché de agujas curvadas, con un impresionante esmalte al fuego.
Así pues, el gran regreso del Delphis es una notable excepción a la regla que se da en una versión completamente rediseñada llamada Oracle. Se trata de una edición limitada de 50 piezas, pero a largo plazo será la piedra angular de una nueva colección.
Del Delphis original, Chronoswiss ha conservado la doble complicación. En primer lugar, una hora saltante digital mostrada en una ventanilla dedicada a las 12 horas. En segundo lugar, un minuto retrógrado indicado por una aguja central ancha que recorre una vía de minutos de 180 grados. El conjunto se complementa con un pequeño segundero independiente, que ocupa la parte inferior de la esfera, a las 6 horas.
El movimiento que acciona esta composición es exclusivo: se ha desarrollado completamente nuevo, específicamente para la nueva generación del Delphis. El anterior movimiento de manufactura fue finalmente descartado en favor de este nuevo calibre Chronoswiss, que se utiliza aquí por primera vez. El nuevo movimiento está chapado en rutenio y presenta un corte de Ginebra que emana del centro y que recuerda al conocido rayo guilloché de Chronoswiss.
El Delphis Oracle es donde Chronoswiss da rienda suelta a toda su artesanía. Es la combinación de las dos habilidades atípicas que se han convertido en el sello de la casa lo que hace que el reloj sea único: Guilloché a mano y esmalte al fuego. Normalmente, las esferas son planas, lo que ya supone un reto para el guillocheur. Sin embargo, una superficie curva presenta una dificultad que muy pocos pueden dominar.
En la parte superior del reloj se despliega una media luna curvada de oro de 18 quilates, realizada por el orfebre. Este guilloché se realiza a mano y conviene recordar que todos los guillochés Chronoswiss se fabrican íntegramente en la manufactura, algo de lo que muy pocas marcas relojeras pueden presumir. El resultado es único, ya que el Guilloché del nuevo Delphis Oracle también entra en la tercera dimensión. El arte de los objetos tridimensionales en una máquina de más de cien años de antigüedad es, sin duda, extremadamente raro, sobre todo porque no ha habido formación para la profesión de guillocheur desde hace casi 50 años.
Como nos tiene acostumbrados, Chronoswiss es siempre una grata sorpresa cuando se trata del esmaltado al fuego. El proceso de esmaltado de una superficie recta ya es extremadamente exigente, pero Chronoswiss se sumerge aquí también en la tercera dimensión. 7 capas de esmalte azul translúcido se extienden sobre la media luna curvada dorada. Este proceso es extremadamente complejo, ya que el esmalte debe ajustarse perfectamente a la curva de la media luna guilloché y tener el mismo grosor y densidad en toda la superficie. A continuación tiene lugar el no menos exigente proceso de pulido del esmalte. Como ocurre con una gema preciosa, sólo la superficie perfectamente tallada y pulida del esmalte al fuego despierta la verdadera fascinación del motivo guilloché subyacente.
El resultado debe ser perfectamente homogéneo para resaltar cada matiz, cada detalle que crea el guilloché. Es un trabajo increíblemente exigente que también es único aquí, pues ya no hay formación para esmaltadores. Todos esos pasos se realizan internamente en el Chronoswiss Enamel-Atelier.
La indicación lenticular del segundero a las 6 horas, denominada por Chronoswiss únicamente “OVNI”, refleja este trabajo en toda su dimensión técnica y estética: Una esfera curvada y tridimensional de oro macizo curvada y tridimensional, microguillochada a mano en la manufactura y acabada con esmalte al fuego azul translúcido, al igual que la luna creciente situada a las 12 horas.
El OVNI flota casi ingrávido sobre la esfera base de color antracita, realzando el efecto tridimensional creado por el guilloché curvado en la parte superior de la esfera. Dos grandes puentes continuos, presentes en muchos diseños de Chronoswiss, confieren al Delphis Oracle una geometría escultural y atrevida poco común, que se refleja en el rotor del movimiento de nueva manufactura, haciendo del Delphis Oracle un todo coherente. El Oracle juega con curvas, profundidades, volúmenes y matices.
