Si bien es grato ir por la vida y de repente identificar a la distancia un Panerai en la muñeca de alguien (algo bien fácil), la emoción se amplifica cuando se trata de un modelo que porta alguna función adicional, como un indicador de reserva de marcha, por ejemplo. Pero cuando se trata de un cronógrafo Luminor o Radiomir, hay que detener la marcha y poner atención, porque estas son palabras mayores y hay muchas historias que relatar.
Desde el surgimiento del especial cronógrafo Radiomir Mare Nostrum de 1943, un prototipo creado para la Marina Italiana, los cronos florentinos siempre hay sido sumamente apreciados. Desde los calibres con cronógrafos “convencionales” de principios de este siglo hasta las ediciones limitadas de Radiomir de 2014 que ocuparon calibres originales Minerva, todos los cronógrafos Panerai son una especie a destacar. Hoy, con la diseminación de los calibres propios de la manufactura de Neuchâtel, la oferta se enriquece constantemente por cada vez más y variadas ejecuciones, entre los que destacan los contadores de regata o las complicaciones con función split seconds.
Pero para el nuevo PAM01111 la fórmula se enfoca en el aspecto estético (que es también es técnica por el material de su caja). Así, tonos nocturnos cobran nueva vida en este nuevo cronógrafo Luminor, el Goldtech Blue Notte que, como su italianísimo nombre describe, se trata de una nueva iteración con una carátula de color azul profundo que emula noche y que se ve protegida por un rotundo claustro en la aleación especial de oro de la casa florentina. Esta aleación de oro se caracteriza por los altos porcentajes de cobre y platino que le confieren un color intenso y mayor resistencia a la oxidación. El metal aleación aporta una nueva dimensión estética a la caja Luminor embellecida, pero que mantiene sus propiedades clásicas y su protector de corona patentado.
En la parte funcional, los pulsadores para el crono se desplazan a la izquierda en tanto que el flanco de la caja, también en azul con grafías en blanco y dorado, va graduado con una escala taquimétrica. Dentro del cuadrante, los segundos corrientes mantiene la ubicación y formas a las 9, mientras que a las 3 aparece el contador de 30 minutos.
Protegido por una ventana de cristal de zafiro ahumado, integrado en la parte posterior de la caja y decorado con un patrón de ondas mediante un proceso de metalización, el movimiento del Chrono Goldtech es el nuevo calibre P.9200 con 42 horas de reserva de marcha. Resistente hasta 50 metros de profundidad, el Luminor Chrono Goldtech Blu Notte se acompaña de una pulsera en piel de cocodrilo azul profundo con un cierre en Goldtech. Una pulsera de caucho adicional, también en azul marino, añade variedad y versatilidad.
Piccolo Due Madreperla PAM01280
Al otro lado del espectro de la relojería de Panerai encontramos la serie Luminor Due, con sus tamaños de caja reducidos, trazos suavizados y ejecuciones más finas. Nacido en 2016, Luminor Due rompió con el pasado de la casa para ofrecer una versión diferente de Panerai, sí, más orientada al estilo que hacia la técnica, pero conservando en lo general el estilo del reloj nacido en 1950.
Hoy, Luminor Due se expande con una nueva y delicada interpretación. El Piccolo Due Madreperla, que ofrece por vez primera una carátula en madreperla (o nácar) que produce una infinidad de destellos y juegos de color que oscilan entre el rosa y el azul. El cuadrante se ve aumentado por las manecillas, índices y marco de la venta para la fecha en chapa de oro rosa. Para una correcta lectura en condiciones de baja luz, las agujas e indicadores horarios van rellenos con Super-LumiNova de activación verde. La estilizada caja del reloj mantiene los 38 mm de los Due y en este Due Piccolo Madreperla está hecha en oro Goldtech.
El Piccolo Due se acompaña de una vistosa correa de piel de cocodrilo en color rojo con el sistema Quick Release para un cambio fácil y rápido. Con ello en mente, Panerai se apura a mencionar que en los puntos de venta de la marca pueden adquirirse otros tipos y colores de correa para personalizar la apariencia del Piccolo Due.
