Breguet: Classique Répétition Minutes 7637

La repetición de minutos es una de esas grandes complicaciones relojeras que pueden describirse como pequeñas obras maestras mecánicas. El nuevo Classique Répétition Minutes 7637, de Breguet, incluye una carátula trabajada con la técnica del esmalte grand feu.

Tan fascinante como intrigante, la repetición de minutos es una de las complicaciones más sorprendentes de la historia de la relojería. Abraham-Louis Breguet, técnico excepcional, se apasionó rápidamente por el tema y buscó la manera de mejorar el mecanismo. Por ello, ya en 1783, creó los primeros relojes con repetición que tocaban sobre una muelle hoja en lugar del timbre campana utilizado hasta entonces. Hoy, Breguet le rinde homenaje con un nuevo reloj, el Classique Répétition Minutes 7637.

La repetición de minutos es una de esas grandes complicaciones relojeras que pueden describirse como pequeñas obras maestras mecánicas. Además del movimiento, incluyen un mecanismo de sonería formado principalmente por martillos que golpean un muelle. Los diversos materiales utilizados en su diseño deben presentar cualidades acústicas evidentes. Por último, todos los componentes deben ser lo suficientemente pequeños como para caber en una caja también pequeña. 

Se requiere un gran rigor, una gran maestría, muchos años de experiencia y una pericia sin igual para crear una repetición de minutos. Por si esto fuera poco, la fabricación de esta complicación necesita más de un mes de ardua labor. Breguet lleva casi 250 años perpetuando este arte en su manufactura del Valle de Joux, en Suiza.

Contrariamente a las apariencias, la esfera minimalista del Classique Répétition Minutes 7637 requiere un saber hacer que muy pocos artesanos practican todavía hoy: la técnica del esmalte gran fuego. Los polvos de color, una mezcla de silicio y de óxidos molidos, se disuelven en agua antes de ser aplicados sobre la esfera siguiendo distintos métodos. La clave reside en el proceso de cocción que viene a continuación. En efecto, cada capa y cada color aplicados necesitan un horneado adicional a una temperatura de más de 800 grados y durante un tiempo sabiamente programado.

Edición: Eduardo Castañeda H.