TAG Heuer Carrera: un homenaje dorado

El espíritu del 1158 CHN sigue vivo. La caja y la esfera de oro amarillo de este TAG Heuer causan una gran impresión, sobre todo cuando se tiene en cuenta el fino cepillado vertical de la esfera y la espectacular vista bajo el alto cristal de zafiro.

A principios de este año, TAG Heuer lanzó una nueva versión del diseño Carrera que sirvió como un nuevo capítulo en la saga de 60 años del icónico cronógrafo. Con un atrevido cristal de zafiro abombado que permite una visión amplia e ininterrumpida de la esfera y el característico perfil limpio del diseño, esta nueva versión del clásico está llena de potencial y marca tanto el tono como el ritmo para el futuro de Carrera.

A juzgar por esta última incorporación, el futuro parece brillante. Este TAG Heuer Carrera Cronógrafo de 39 mm de oro amarillo demuestra la versatilidad de este nuevo diseño, a la vez que rinde homenaje a uno de los Heuer Carrera más codiciados de todos los tiempos. Un reloj conocido simplemente como “el reloj del piloto”.

La referencia 1158 CHN, para dar al modelo su nombre propio, es emblemática de los estrechos vínculos entre TAG Heuer y el mundo de la Fórmula 1. En 1971, Jack Heuer fue el primer patrocinador no automovilístico de Ferrari y, además de los equipos de cronometraje, hizo un trato con los pilotos de la escudería. Les ofreció un Carrera de oro macizo, con esfera color champán y subesferas negras (el CHN de la referencia hace referencia a esta disposición específica de la esfera), con la condición de que tuvieran que visitar la fábrica de Heuer en Suiza para recogerlos. Pronto, estos relojes distintivos se encontraron en las muñecas de los pilotos más rápidos del mundo, hombres como Niki Laude y Mario Andretti.

En cuanto al reloj en sí, sin duda cumple su promesa dorada. La caja y la esfera de oro amarillo causan una gran impresión, sobre todo cuando se tiene en cuenta el fino cepillado vertical de la esfera y la espectacular vista bajo el alto cristal de zafiro. Los elementos negros añaden un contraste que amplifica aún más el precioso tono. En lo que respecta a la precisión histórica, se trata de una línea muy fina. Es innegable que el reloj es un homenaje a los modelos originales 1158 CHN, pero sin dejar de ser algo propio. El aspecto general de la caja, aunque sensible a la estética vintage, es claramente moderno. Uno de los cambios más notables con respecto a las icónicas referencias históricas es la correa de becerro negro liso en lugar del brazalete de malla de oro macizo, pero dado el impacto que tendría en el precio el oro adicional, no es probable que mucha gente se queje.

TAG Heuer no ha sido tímido a la hora de celebrar el 60 aniversario del Carrera con estilo, y es lógico y apropiado que hayan elegido honrar una de las referencias más legendarias con estilo.